5 Consejos: El porte y el Vestir del Caballero Cristiano
Algo que causa mucha inquietud entre los cristianos jóvenes en la actualidad es el conocer qué de lo que ellos hacen en su día a día puede agradar a Dios o, por el contrario, deshonrarle. Uno de los temas más recurrentes a dudas es el vestir: ¿Es verdad que Dios también se fija en nuestro vestir? De ser así, ¿Cómo puedo agradar a Dios con mi manera de vestir? Aunque Dios mismo ha testificado de sí que mira el corazón (1 Sam. 16:7) también declara que el creyente por sus obras reafirma su fe (Sant. 2:14-17), por lo que ambas realidades nos llevan a pensar una cosa: Si nuestro corazón abunda en deseo de honrar a nuestro Dios, lo podremos exteriorizar aún en nuestro vestir. Es muy común escuchar sermones relacionados con el vestir y porte de las hermanas, donde se les anima a ser piadosas y consideradas, pero acaso los varones estamos excluidos de esto? Por supuesto que no. Imaginemos que nos dirigimos a nuestro armario, y al tenerlo de frente, le damos la siguiente ord